Diario
Literatura

Ricardo Piglia ocupa un lugar central en el espacio literario argentino desde mediados de los años sesenta. Sus intervenciones públicas tanto como sus textos críticos y ficcionales produjeron un fuerte impacto en los modos de leer. En su obra se reitera una interpelación polémica que se puede sintetizar en un interrogante ¿desde qué tradición narrar? En torno a ese dilema, que tiene una presencia insistente y obsesiva en sus textos, se centró el curso que dictamos en el Museo en mayo/junio de 2014 bajo el título de "Piglia entre la tradición y la ruptura".

El eje del programa apuntaba a poner de manifiesto algunas de las cuestiones más trascedentes de su pensamiento. Piglia ha afirmado reiteradamente que un escritor desarrolla su obra instalado en una tradición y desplazó la oposición entre Borges/Arlt, lugar común de la crítica literaria argentina, para señalar un conjunto de correspondencias entre ellos antes que oposiciones que enfrentaran sus poéticas.

Piglia más que ninguno otro de los escritores argentinos contemporáneos ha sido un lector que escribe, por lo tanto en el curso revisamos las maniobras de apropiación de esas lecturas en sus textos: la parodia, la cita, el plagio y los entramados de historia y ficción. Otro asunto sobre el  que insistimos estaba enfocado en las simetrías entre el crítico y el detective; ese señalamiento permite pensar la crítica y la teoría literarias en correspondencia con el género policial. La caracterización de un modo de leer como ficción paranoica es uno de los grandes aportes de Ricardo Piglia, junto con el motivo del complot como forma literaria. Esa exploración ocupó  una instancia decisiva de nuestro trabajo.

En sus novelas y cuentos, nos propone un desafío que invierte un lugar común: no importa cuanta realidad hay en la ficción sino cuanta ficción hay en la realidad. Lo que se sintetiza en la fórmula pigliana: "La ficción no copia a la realidad, sino que la postula.

En sus novelas y cuentos sobre los que centramos las actividades del curso una y otra vez regresamos a algunos tópicos de su poética literaria: en el principio de todo relato hay una muerte o un viaje o toda narración puede ser leída como una experiencia de la utopía de la búsqueda del sentido.

Al momento de pensar estas líneas he revisado mis notas sobre las clases y las versiones de las desgrabaciones de las mismas, la intensidad con que quienes asistieron intervenían, aportando ideas o exhibiendo las derivas de sus lecturas, es un testimonio inigualable del modo en que su escritura  conmovía a sus lectores.

Piglia ha sido un exponente inigualable de la posibilidad de establecer un vínculo indisoluble entre el talento de un lector crítico perspicaz y la sutil inteligencia del narrador ficcional. A todo ello, sumaba una generosidad personal muy difícil de asediar con las palabras.

Hoy nos ha quedado un vacío y una desolación abismales, hoy tras la noticia infausta de su muerte, deberemos refugiarnos en sus libros en los que se prolonga y profundiza su gesto de lector inigualable.

Roberto Ferro
Enero 2017

MALBA tuvo el placer de compartir diferentes actividades con Ricardo Piglia. La actividad de la que se hace referencia en el texto es el curso Ricardo Piglia. Entre la tradición y la ruptura que Roberto Ferro dictó en mayo 2014.
La foto corresponde al ciclo de conferencias Nuevas tesis sobre el cuento que Ricardo Piglia dictó entre junio y julio de 2010. Crédito fotográfico: Guyot.