En el díptico Wage die Stille (Atrévete al silencio, 1995/2021), incluido en la exposición Aó Episodios textiles de las artes visuales en el Paraguay, el artista paraguayo Osvaldo Salerno trabaja con el textil industrial. La obra consiste en dos paños de entretela blanca sobre los que aparece bordado a máquina un aforismo de Augusto Roa Bastos: “Salí del encierro oliendo a intemperie”. La frase remite al encierro de las dictaduras, que se creía terminado luego de la caída de Stroessner en 1989, y se repite incontables veces, como si se tratara de un mantra o de un ejercicio de penitencia escolar. En el primer paño, está escrita en español; en esa versión, el orden de las letras está invertido y la escritura apenas se distingue sobre la tela, requiriendo un gran esfuerzo de parte del espectador para descifrarla. En el segundo, está escrita en guaraní y la caligrafía es más legible. 


Osvaldo Salerno. Wage die Stille, 1995/2021.

Salerno trabaja sobre los obstáculos de las lenguas y la traducción. En Paraguay existe un uso mayoritario del guaraní, pero la política lingüística oficial aspira a la castellanización de la población y las instituciones. La obra busca invertir esa dinámica: la disposición en espejo de la frase en castellano dificulta su lectura; la escrita en guaraní puede leerse con facilidad. Alude así a una de las barreras más grandes de los hablantes de guaraní al enfrentarse con el aparato institucional, diseñado para quienes entienden y leen el castellano.

La pieza realiza un ejercicio sobre el lenguaje que es también un ejercicio sobre la memoria, el dolor y la restitución. En palabras del crítico Ticio Escobar: “Al ver sustituido su suelo de origen y transgredido el material de su oficio (al ver cambiados los papeles, valga la literalidad), la escritura debe responder ahora a los desafíos nuevos que le propone el lienzo. Por eso los signos no están dibujados o impresos, sino bordados. Laboriosamente bordados. Afanosamente: como trabaja la memoria al reconstruir los retazos de signos deshilachados. Más que actuar como trazos inscritos sobre la superficie, ahora los manuscritos atraviesan el soporte. Buscan confundirse con su materia enredando los hilos en la trama de la tela. Quieren hilvanar lo evocado e intentan después retenerlo, ajustando, cosiendo, rematándolo. Y haciéndolo así, producen relieves, marcas que abultan la superficie como costurones. Como cicatrices que, para reinscribir la lesión, han debido invertir la cavidad del surco y convertirla en piel resaltada”.


Detalle del texto espejado y casi ilegible en español.


Detalle del texto en guaraní.

 

La exposición Aó Episodios textiles de las artes visuales en el Paraguay, curada por Lía Colombino, continúa hasta el 2 de agosto de 2022 en Malba. 

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